lunes, 17 de septiembre de 2007

Los alumnos del IES La Estrella no irán a clase hasta que haya fecha para concluir las obras del centro

J. PRIETO
http://www.abc.es CÓRDOBA.

Polémico comienzo de curso. Y ya es habitual en los últimos años. En el Instituto de Secundaria Nuestra Señora de la Estrella, de Villa del Río, vendrá marcado por la decisión de los padres de la mayoría de sus alumnos de que éstos no acudan a clase hasta que la Delegación de Educación de la Junta no les facilite una fecha real de la conclusión de un edificio que, entre otras instalaciones, acogerá un gimnasio que ampliará los recursos del instituto.El hecho no es caprichoso, ni mucho menos una pataleta. Al contrario, las obras comenzaron hace cuatro años y medio, el mismo tiempo que llevan paralizadas, lo que ya ha provocado numerosas manifestaciones a las puertas del instituto. Mañana habrá una más, que se sumará a la no asistencia a clase de manera indefinida hasta que Educación atienda sus peticiones.El motivo de que las obras no se reanuden es la existencia de cables de alta tensión sobre el edificio que se construye. En noviembre de 2006, la Junta encargó a Endesa el traslado de dicha instalación, para poder reanudar los trabajos, aunque aún no se ha llevado a efecto.Ello ha provocado de nuevo la indignación entre los padres, los alumnos y hasta los profesores, que «nos apoyan moralmente», explica el vicepresidente de la Asociación de Madres y Padres (AMPA), Juan Antonio del Castillo, pero que no van a secundar la no asistencia de los estudiantes porque «tienen que cumplir su trabajo», justifica, sobre todo si finalmente hay alguien que quiere que su hijo vaya.Peligro de derrumbeEl pasado mes de junio mantuvieron la última reunión con la delegada de Educación, Dolores Alonso, en la que pusieron sobre la mesa no sólo la demanda de una fecha para que acaben las obras, sino el peligro de derrumbre que existe de un muro que la Delegación construyó para separar la parte del instituto hábil de la zona en la que se construye el nuevo edificio. «El año pasado se cayeron cascotes cuando hizo mucho aire», explica Del Castillo. Enseñó fotografías de esto mismo a la delegada, aunque según dice «no contestó», de la misma manera que tampoco les dio una fecha «porque ni ella misma la sabe».Los padres quieren que se garantice la integridad física de sus hijos, así que mantendrán la falta a clase de manera indefinida. Sus protestas no son las únicas en la provincia, pues mañana tampoco comenzarán el curso varios alumnos de Doña Mencía y de El Palomar, en Puente Genil, como estaba previsto. En éste último caso, los padres no llevaran al colegio a sus hijos hasta que la Junta licite las obras de un nuevo edificio que les permita no dar clase en aulas prefabricadas