jueves, 22 de enero de 2015

La CNT de Córdoba y local, habla de la situación del campo.

Sobre la situación del campo. Expropiación, eliminación peonadas y
convenios dignos.

La realidad que encontramos en el campo y el trabajo agrícola en la
actualidad es lamentable. L@s trabajadoras/es del campo en Andalucía y
en todo el estado son de l@s más afectad@s por la situación económica
actual a pesar de la invisibilización de los medios de comunicación.

Actualmente un/a trabajador/a agrícola cobra un sueldo muy por debajo
del de otros sectores. Por ejemplo, aquí en la provincia de Córdoba el
sueldo está en 42 euros por jornada, el más bajo de toda la comunidad.
Además en el último Convenio Provincial firmado por UGT y la patronal
se incrementa la jornada laboral y se mantiene el mismo sueldo, además
de imponerse legalmente unas condiciones de total sumisión por parte
del trabajador que en la práctica no puede oponerse a las directrices
del
encargado o manijero, por muy descabelladas que estas sean. Esto
sumado a la eventualidad del trabajo en el campo hace que este sea uno
de los sectores más precarios laboralmente.

El problema del campo en este país y sobre todo en la región andaluza,
en concreto, viene de largo y arrastra los mismos problemas que hace
décadas. Tras la llamada Transición y con el nuevo régimen político se
pretendió contentar a los jornaleros con el denominado PER y la renta
agraria, con el objetivo de que los pueblos no se quedarán abandonados
y de apagar las protestas en el campo. La Reforma Agraria volvió a ser
papel mojado y la distribución de la tierra siguió en manos de unos
pocos terratenientes y familias que todavía hoy concentran la mayor
parte de las tierras.

Los trabajadores del campo han sido y son menospreciados y ninguneados
por los gobiernos nacionales y autonómicos, con unas condiciones
laborales penosas y con cada vez menos derechos. Unido a esto está la
discriminación de la mujer en el trabajo agrícola, negándose muchos
empresarios y manijeros de manera sistemática a contratar a mujeres en
las temporadas agrícolas.

La cada vez mayor mecanización del sector agrícola, las políticas
machistas y sexistas mencionadas de los empresarios del campo y
terratenientes, los cada vez mayores niveles de producción que se
exigen en las cosechas, los Convenios cada vez más a la baja (eso si
se
cumplen), etc, hacen que este sector fundamental este en unas
condiciones laborales comparables al siglo XIX.

Además de todo esto, en la coyuntura social y laboral en que nos
encontramos con cerca de seis millones de parad@s, precariedad laboral
generalizada y recortes de prestaciones y derechos laborales y
sociales, muchas jornaler@s no tienen más remedio que trabajar en
estas
condiciones en algunas campañas como el ajo o la naranja, en las que
ni siquiera se paga lo estipulado en Convenio, por el mero hecho de
conseguir las peonadas agrícolas necesarias y poder tener unos mínimos
ingresos en sus casas.

El requisito actual en el campo para cobrar la renta agraria es de 35
peonadas(este año se quedaría en 20 por la baja producción de la
campaña de la aceituna), además de tener un año entero cotizado en
este régimen.
En años como este en que la cosecha de la aceituna, fundamental en
esta región, no ha representado ni un 20% de la cosecha del año
anterior y teniendo en cuenta la poca diversidad de cultivos debido a
las elevadas subvenciones y ayudas al olivar a los grandes
propietarios, hacen que juntar estas peonadas para muchos jornaleros
sea muy complicado.

Pero a pesar de las condiciones de trabajo miserables en el agro y la
falta de derechos de l@s jornaler@s, nos encontramos con una minoría
de familias aristocráticas, constructores y de grandes fortunas que
reciben millonarias ayudas de Bruselas, sobre todo en las provincias
de Sevilla,
Córdoba y Jaén, y acumulan miles de hectáreas, mientras miles de
familias no pueden acceder a los recursos básicos y cada vez son más
las que viven en situaciones de extrema pobreza, con índices cada vez
mayores de pobreza infantil.

Históricamente la CNT ha tenido una fuerte presencia en el campo y
hemos seguido el lema de la tierra para la/el que la trabaja. No sé
pueden permitir que el campo esté en manos de unos pocos millonarios y
que se den estas condiciones laborales y estas políticas agrarias en
pleno siglo XXI.

Esta situación se puede cambiar estando informados y organizados,
denunciando las condiciones laborales en los tajos y a los empresarios
que no cumplen los Convenios y se aprovechan de la situación de
necesidad de much@s trabajadoras/es del campo, a la vez que nos
organicemos para conseguir mejores Convenios.

Por todo esto, desde la CNT de Córdoba, exigimos la eliminación del
requisito de las peonadas para cobrar el paro agrario y la puesta en
marcha de una renta básica, que haya un banco de tierras públicas para
l@s trabajadoras/es desemplead@s, mediante expropiaciones de tierras
baldías y desaprovechadas, que sean trabajadas de manera
autogestionada, y que a la vez que se actúe contundentemente para que
se respeten los
derechos laborales en los tajos.

CNT Córdoba